El pan asado es uno de los alimentos más sencillos y tradicionales de nuestra cocina. La sencillez del plato no impide que sea delicioso y muy apreciado por mucha gente. El pan francés se corta por la mitad y se coloca en un plato caliente, donde se tuesta hasta que esté crujiente y dorado. Luego, se añade un poco de mantequilla y se derrite sobre el pan caliente, haciéndolo aún más sabroso.
El aroma del pan tostado y calentito es capaz de despertar el apetito de cualquiera. Y la combinación de la textura crujiente del pan y la cremosidad de la mantequilla es irresistible. Es un plato sencillo, pero que ofrece una experiencia gastronómica única, capaz de aportar una sensación de confort y calidez. Es una opción ideal para el desayuno o la merienda, acompañado de un café caliente o un zumo natural.
El pan asado es uno de esos alimentos que nos transporta a la infancia, a ese rico snack en la panadería de la esquina, o a momentos de relax y diversión con amigos y familiares. Es un plato sencillo, pero que tiene un sabor y un recuerdo cariñoso que lo hace tan especial y querido por muchos. No hay nada como un pan caliente y crujiente a la parrilla para hacer tu día más agradable y feliz.
PAN A LA PARRILLA
INGREDIENTES
- 1 pan francés
- mantequilla al gusto
La forma de preparar esta receta es muy sencilla y estoy segura que si la sigues paso a paso podrás hacer tu receta, te quedará maravillosa.
MÉTODO DE PREPARACIÓN
¡Hacer pan a la plancha es muy sencillo y rápido! Necesitará una sartén o plancha caliente y un poco de pan francés fresco. Aquí está el paso a paso:
Corta el pan por la mitad, de forma horizontal.
Precalienta la sartén o plancha a fuego medio-alto.
Cuando esté caliente coloca las dos mitades del pan con el lado cortado hacia abajo.
Deje que el pan se tueste durante aproximadamente 1-2 minutos, hasta que se dore.
Con una espátula, voltea el pan y tuesta el otro lado durante 1 o 2 minutos más.
Si lo deseas, agrega una pequeña cantidad de mantequilla o margarina a cada mitad del pan antes de servir.
¡Listo! Ahora tienes un delicioso pan en el plato para disfrutar. Se puede servir solo o acompañado de mermeladas, requesón, queso, jamón, huevos revueltos y otros ingredientes de tu elección. Es una excelente opción para un desayuno rápido o una deliciosa merienda.
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